Además de un bonito árbol de navidad, también hay que tener en cuenta la mesa donde pasaremos unos de los ratos más agradables con nuestros seres queridos. Una opción muy sencilla y que seguro asombra y gusta a los comensales son las piñas fluorescentes. Ideal para que lo hagan niños y se sientan partícipes de la decoración navideña de la casa.
Para realizar esta manualidad navideña tan solo se necesita:
- Tantas piñas como personas vaya a haber en la mesa.
- Pintura acrílica fluorescente del color que elijas.
- Una cartulina.
- Rotulador.
Lo primero que hay que hacer es lavar muy bien las piñas. Si en el lugar donde vivís no tienes la posibilidad de cogerlas naturales, puedes acudir a una tienda de decoración de navidad. Seguro que las encuentras y te ahorrarás el proceso de limpieza de posibles insectos.
Con ayuda de un pincel se van pintando todos los extremos de la piña. Mientras se seca cortamos la cartulina en el tamaño que desees (no demasiado grande) y ponemos en cada una el nombre de los invitados.
Finalmente, colocamos en cada plato la cartulina con el nombre de quien va a sentarse en ese lugar, sujetándolo con la piña de colores.