Cuando llega la navidad vemos un montón de catálogos y revistas con decoraciones de ensueño. No todas las casas en navidad tienen que ser como las que aparecen en las revistas, lo mejor es que esté decorada como tú quieres que lo este, que este personalizada con cosas que te traigan recuerdos o tengan una historia. Para ello, te damos algunos consejos:
Recupera aquellos adornos de tu infancia. Seguro que rebuscando en cajas encuentras figuritas de cuando eras pequeña o un belén antiguo… Además incorporándolos a la decoración será un buen momento para contar a tus hijos tus historias y anécdotas navideñas de la infancia, ideal para pasar un buen rato.
A los niños les encanta participar en la decoración navideña ya que para ellos es un motivo de felicidad, la navidad en la infancia supone felicidad, regalos, dulces y toda una familia reunida. Aprovéchalo para que ellos se involucren más creando ellos mismos sus propios adornos. Pueden hacer guirnaldas, figuritas y postales. Las postales también pueden servir para felicitar la navidad a familiares y amigos.
De esta manera conseguirás una decoración única y gastando muy poco dinero. Y si ponéis la decoración toda la familia junta seguro que pasáis un rato muy agradable.